Un mirador urbano
para el avistamiento de aves
Santander cuenta con lugares propicios para el avistamiento de aves, lo que incentiva el equilibrio y sensibilización ambiental. Bucaramanga es uno de ellos.
Si hacemos una analogía con un aeropuerto de alto tráfico, pero con aves, el Área Metropolitana de Bucaramanga sería una terminal con alta frecuencia de salidas y llegadas de especies que tiene como destino una zona urbana. Uno de los lugares inaugurados en 2016 fue el Parque Metropolitano Las Mojarras, localizado entre los barrio Lagos del Cacique, Hacienda San Juan y el conjunto Fátima, y que precisamente es una pista urbana de aves. El parque está ubicado en medio de una zona urbana, la cual alberga especies nativas y migratorias; así, es un lugar representativo para la observación de aves por parte de los ornitólogos (especialistas en aves).
El Bienteveo común o también llamado en Colombia el Bichofué Gritón se caracteriza por su pico igual de largo a su cabeza, además de su grito agudo y prologando.
Foto: Diego Dávila, biólogo.
El Mosquero Cardenal es un ave migratoria desde Estados Unidos que tiene el copete y pecho rojo; vaga a menudo entre arbustos y los alrededores de las viviendas.
Foto: Diego Dávila, biólogo
Santander es un área clave del proceso migratorio de aves. Así lo asegura la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, CDMB, debido a que arriban cada año más de 92 tipos de especies de las 275 que entran al país. Pero ¿cuál es el rumbo de viaje de las aves migratorias? Inician su ruta de migración en las estaciones de otoño y primavera, atravesando el Océano Pacífico y Atlántico hasta llegar a Colombia, en donde inician su trayectoria hacia el interior del país por la Sierra Nevada de Santa Marta, Chocó, la Costa Caribe, el oriente de Los Andes y los corredores amazónicos logrando expandirse por todo el territorio colombiano.
Las reinitas hacen parte de la lista de aves que migran desde Norteamérica hasta el Área Metropolitana; se pueden encontrar en diferentes tipos de clases como lo son las Reinita Cielo Azul, Alidorada, de Manglar, de Canadá, el Mosquero Cardenal y el Bienteveo Común, entre otras, la cual es una especie de aves que ha disminuido su población en Santander en un 70 por ciento en los últimos 40 años. La CDMB advierte que el cambio climático, la contaminación y la desintegración de su hábitat ha detenido su proceso; de esta manera, se resalta el papel primordial de las aves migratorias encargadas de generar un equilibrio ambiental en los ecosistemas, puesto que polinizan las plantas, reciclan los nutrientes de vuelta a la tierra, además de controlar insectos y roedores.
La Reinita de Manglar o Reinita Dorada realiza su migración desde Norteamérica hasta Suramérica, se alimenta de arañas y bayas en arbustos cerca del agua
Foto: Diego Dávila, biólogo.
Asimismo, unos de los grupos de aves migratorias que llegan al Área Metropolitana de Bucaramanga están conformados por la Reinita Cielo Azul, inconfundible entre los ornitólogos por su mancha blanca en el pecho y un color azul en todo su cuerpo; el macho se reconoce por ser territorial y es observado la mayoría de veces revoloteando entre los árboles. A solo 80 Km de Bucaramanga está el municipio de San Vicente de Chucurí, en el que se encuentra ubicado la primera reserva natural de las aves Reinita Cielo Azul suramericana. Por otro lado, en el listado de migración está la cebrita trepadora, la candelita norteña y el picogordo degollado quienes tienen una función vital en el ecosistema de Colombia.
Los árboles, el resguardo de las aves
El Picaflor Vientre Negro más conocido como Colibríes es característico por su color azul brillante en la garganta, y llega a migrar hasta 1000 kilómetros de su área original.
Foto: Diego Dávila, biólogo.
Cada árbol o zona verde en la ciudad es una pieza fundamental para la migración de aves. En la calle 44 entre la carrera 29 y 30 está el Parque de las Palmas, un sitio al que llegan pericos, palomas y diversidad de aves, debido a que está rodeado con un abanico de palmeras y árboles; allí se puede observar con facilidad la llegada de estos pájaros desde las bancas que rodean el parque.
El campus de la UIS, según el ornitólogo Daniel Badillo Mojica, coordinador del Semillero de Ornitología de la UIS, es un escenario propicio para el avistamiento de aves. En 337 mil metros cuadrados de espacio conformados por tanques con tortugas y babillas, canchas deportivas, jardines botánicos y largos tramos de arbolados, los ciudadanos pueden realizar recorridos los domingos en compañía de sus mascotas. Badillo, junto con otros ornitólogos, realiza actividades con el fin de incentivar la conservación de las aves mediante jornadas de observación dentro de la actividad institucional llamada "Vecinos y amigos" que se llevan a cabo todos los domingos para el público en general.
Uno de los principales peligros causados por la mano del hombre a los que se ven enfrentados las aves migratorias y las representativas en Santander es el crecimiento urbanístico y la cacería indiscriminada. Juan Felipe Chica, médico veterinario de la Coordinación de Fauna de la CDMB indica la importancia de que la comunidad tome conciencia sobre la relevancia de las aves migratorias y su papel en el equilibrio del ecosistema.
La reedificación de zonas verdes
en una ciudad de cemento
Por cada árbol cortado se deben sembrar cinco más garantizando su supervivencia, señala el veterinario de la CDMB, quien agrega que antes de talar un árbol es necesario hacer estudios sobre los posibles nidos y especies que habitan en él. En Santander no existe una especie de aves representativa, pero sí lugares en los que se encuentra en gran cantidad garrapateros y colibríes (también llamados pica flor o zumbadores). Estos últimos resaltan por la belleza de sus colores y la velocidad de su vuelo, por ser el ave más pequeña del mundo. Por el contrario, el chavarrie es un ave grande de 91 centímetros, con un cuerpo de color negro, cabeza blanca y párpados rojos; además, por su temperamento es utilizada en áreas rurales como el municipio de Guapotá en la provincia comunera para cuidar corrales de finca.
La Amazilia tzacatl o colibrí se distingue por su cola rufa o colorada y su brillante pico rosado.
Foto: Diego Dávila, biólogo.
El Parque de los Niños, más conocido como el parque natural de la 'Ciudad Bonita', es un lugar de acogimiento y resguardo de las aves migratorias y endémicas de Santander, la paloma Bravía es un ave migratoria y una especie común visualizada en el Parque de los Niños; se caracteriza por sus ojos rojizos, un color gris a lo largo de su cuerpo y en la parte del cuello un tono morado, verde y negro.
El Sarrapio es una variedad de árboles de 8 a 30 metros de altura de la que se sustrae la cumarina, una sustancia aromatizante. El Parque Sarrapio o de las Estatuas hace alusión a los árboles que están sembrados a sus alrededores. Está ubicado en Cabecera del Llano, en la carrera 39 y la calle 46; allí se encuentran construidos unos nidos en forma de casas, especiales para las palomas que habitan el lugar; es una costumbre de quienes visitan el parque alimentar a las palomas que viven en lo palomares, de las que hacen parte las palomas Rabiche y Bravia. Además, se pueden observar los colibríes y pericos.
El Periquito de Tovi es de la familia de los loros, son vistos en jardines, parques y zonas suburbanas volando en pequeñas bandas ruidosas
La observación de aves es una iniciativa ecoturística en Santander debido a su ubicación geográfica, puesto que hace parte de los tres ramales de Los Andes, en este caso, el de la cordillera oriental. Por esta razón, la diversidad de aves, tanto migratorias como las aves endémicas, hace parte de la biodiversidad de flora y fauna del Departamento. Hay que rescatar que las aves no tienen un hábitat específico, ya que su área de vuelo es muy amplia, pero sí residen en las diferentes zonas verdes del Área Metropolitana de Bucaramanga el Colibrí, la Reinita y el Chavarí, las cuales son especies habituales a nivel general en Santander. Esto representa un punto de partida para la llegada de ornitólogos extranjeros, la ampliación de estudios y concientización del cuidado de las aves.